Tanto la urgente eliminación de la corrupción como el pronto inicio de medidas de transparencia por parte de la Unidad del Sistema de Carrera Magisterial (USICAMM) son exigencias inmediatas.
Material de estudio:
Gilberto Maldonado Maldonado, dirigente del Consejo Democrático Magisterial Poblano (CDMP), lanzó la advertencia de que si no se realizan ajustes, podrían enquistarse procedimientos insuficientes para la entrega de plazas y cambios, lo que pondría en riesgo el trabajo de muchos educadores.
Usicamm recibe solicitudes de cambio de legislación en pro de los educadores
Exigencia del sindicato
Fue durante la administración bipartita cuando se desarrollaron un gran número de vicios, por lo que considera que la SEP debe ceder a la exigencia del sindicato de que se le deje continuar con su práctica de asignación de plazas y concursos.
No se puede descartar por completo que el sindicato, en su papel de directivo de las seccionales, siga metiendo las manos al agua. Sin embargo, se desea que la SEP lo controle, pero bajo una total transparencia, que garantice que se están asignando de la manera más adecuada.
Continuó diciendo, «no digamos que siguen metiendo las manos, pero cuál es la explicación de que están luchando, pero en serio para llegar a las directivas seccionales, estoy casi seguro que hay corrupción dentro del sector educativo», en referencia a la SEP.
Y a pesar de que desde hace tiempo se encuentra fuera del servicio activo en el sistema educativo, afirmó que, con base en lo que ha observado y escuchado, sigue existiendo el aspecto fundamental de la reforma que fue promulgada en 2013 por el ex presidente Enrique Pea Nieto, es decir, la incapacidad para evaluar, como si fuera una garantía de las capacidades del maestro.
Luego de ello, el jefe de la disidencia magisterial en Puebla afirmó que no están de acuerdo con esas prácticas y dio la siguiente razón: «un maestro que egresa de una Normal es porque cubrió todos los créditos que marca la SEP y en consecuencia acredita que está preparado para ejercer la profesión, igual que un licenciado o un ingeniero».
De acuerdo con lo escrito por el autor, «entonces no parece que quieran manejarlo así, de manera transparente», pues lo mismo tienen con los procesos que proponen contra las plazas directivas. «Por la cantidad de gente que tenemos al frente de las escuelas, y con todo respeto por ello, las escuelas son un completo desastre por su culpa».
Afirmó que carecen de autoridad para tomar decisiones, lo cual es problemático porque «muchos de los procesos dejan mucho que desear.» Esto se debe a que quien ahora acredita un examen es ascendido instantáneamente al cargo de director.
Esto demuestra que la SEP está más preocupada por ajustarse a reformas o demandas no resueltas que por arreglar el tema educativo de fondo.
«Hay compañeros afectados por los cambios que se están produciendo, llevamos 6 o 7 años al margen, están más o menos al día de lo que está pasando», dice un miembro del CDMP que ha estado «al margen» los últimos siete años.
